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Revista de la Asociación Colombiana de Ciencias Biológicas
            issn impreso 0120-4173, issn en línea 2500-7459
            Discusión                                          clusiva de los homosexuales, en parejas heterosexuales
            Diversos estudios (2, 6, 23) expresan que las ITS prin-  también se ha vuelto una práctica común, lo que hace
            cipalmente se generan por contacto sexual sin protec-  que puedan tener las mismas posibilidades en contraer
            ción, incluidos el sexo vaginal, anal y oral, pero además  una Infección.
            se pueden propagar inclusive cuando hay protección o
            por medios no sexuales como, por ejemplo, las transfu-  La OMS (2) y Álvarez et al. (1) describen que existen
            siones de sangre o productos sanguíneos. Muchas ITS  ITS que no son curables como el virus del papiloma
            pueden transmitirse también de madre a hijo durante el  humano, hepatitis B, virus del herpes simple y VIH e,
            embarazo o el parto. A pesar de ello, no se evidencian  infecciones que sí tiene cura; las cuales son llamadas
            estudios que determinen que se pueda adquirir una in-  clásicas como la sífi lis, la blenorragia o gonorrea, la cla-
            fección de esta índole en el baño, una piscina, por la  midiasis y la tricomoniasis. Es importante señalar que si
            picadura de un mosquito, el compartir alimentos y cu-  bien hay ITS incurables existen tratamientos capaces de
            biertos, sino por el contrario, se precisa que estas con-  atenuar o modifi car los síntomas o la enfermedad.
            cepciones son errores de conocimientos y que muchas
            veces hace que se desconozcan los verdaderos focos de  Asimismo, las ITS pueden manifestarse o no, es decir
            infección, representando esto, mayor riesgo para la po-  pueden  ser  sintomáticas  o  asintomáticas;  siendo  esta
            blación sexualmente activa (24, 25).               última condición la más frecuente (3) dependiendo del
                                                               género, ya que, a diferencia de los hombres, las mujeres
            Rodríguez  y  Villegas  (26)  manifi estan  que  la  higie-  rara vez acuden al médico puesto que a menudo no pre-
            ne como remedio para evitar una ITS es un mito en la  sentan síntomas si están infectadas. Además, hay que
            sexualidad que trae como consecuencia que se contri-  tener cuidado con estos aspectos ya que, en las mujeres,
            buya a la propagación de estas infecciones, pues mucha  las  infecciones  asintomáticas  pueden  ser  más  graves
            gente piensa que una "buena" higiene previene el con-  que las sintomáticas; por lo que es de precaución estar
            tagio. Por su parte, Peláez (27) alude que un preservati-  alerta. Aunque los hombres tienen más probabilidades
            vo usado de forma sistemática, correcta y en cada coi-  que las mujeres de presentar síntomas, frecuentemente
            to permite reducir el riesgo de adquirir una ITS, como  los hombres suelen ignorarlos si no son graves y es un
            también de un embarazo. No obstante, el confl icto es  aspecto que resulta también inquietante. Por otra parte,
            la inconsistencia en su forma de empleo, los condones  a pesar que la condición de una ITS de forma asintomá-
            fallan debido a su uso incorrecto o por rotura durante las  tica sea más recurrente en las mujeres eso no exime que
            relaciones sexuales.                               los hombres no puedan presentarla (30).

            Por otro lado, la ONUSIDA (28) señala que dentro de  Caricote (31) indica que los aspectos positivos o nega-
            los errores conceptuales entre lo que es una enfermedad  tivos sobre la sexualidad inciden en los estudiantes de
            y agente que produce dicha enfermedad o síndromes, es  acuerdo a la historia de la sexualidad de los padres/ma-
            muy común el emplear como término similar lo que es  dres y de los docentes; es de este modo como se cons-
            el VIH (el cual es referido al virus) y el SIDA (detalla el  truye una valoración moral a partir de las concepciones
            síndrome clínico), por lo que se hace indispensable que  de los padres o profesores.
            se emplee cada término de forma específi ca y apropiada
            de acuerdo al contexto.                            En términos generales, es  preocupante que aún exista
                                                               gran prevalencia de ciertas confusiones en las concep-
            Investigaciones  realizadas  por Apers  et  al.  (5)  y  Gu-  ciones de los estudiantes alrededor de las ITS; en algún
            tiérrez-Sandí y Blanco-Chan (6) describen que en las  modo es comprensible que los estudiantes que están ini-
            relaciones sexuales entre hombres se es más propenso  ciando la formación educativa  no tengan claridad res-
            a adquirir de una ITS, incluso casi en un 10% más que  pecto a ciertos aspectos del tema en mención, ya que,
            en los actos sexuales entre hombre y mujer, pues, de  estos aún vienen con algunas conocimientos erróneos
            acuerdo con Rodríguez y Villegas (26) el coito anal es  de la escuela y la casa, pero, si se analiza y se compara
            la práctica sexual de más riesgo; la mucosa anal es muy  el grado de diferencia según al análisis estadístico de
            frágil y se suelen producir pequeñas heridas, haciéndo-  comparación de proporciones, entre una concepción  y
            se más propenso a adquirir una ITS. No obstante, pese  otra según el semestre de estudio, no se discrepa mucho
            a la serie de mitos culturales que estigmatiza a ciertos  entre lo que concibe un estudiante de primer semestre
            grupos sociales (29), el sexo anal no es una práctica ex-  con relación a los estudiantes de último semestre, o sea

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